Los postres tradicionales italianos son típicamente sabrosos. Aunque hay muchos tipos de postres italianos entre los cuales elegir, varios de estos manjares dulces se destacan. Estos postres han cobrado popularidad y a menudo pueden encontrarse en todo el mundo. Además de en los restaurantes, los postres italianos se sirven en bodas, fiestas y eventos. Puedes escoger uno o algunos de estos destacados postres italianos para hacer o comprar para tu próxima ocasión especial.

Tiramisú

El tiramisú es un pastel italiano en capas. Este postre se hace alternando capas de galletas de vainilla, o lenguas de gato, empapadas en café expreso y con una mezcla de queso mascarpone, yemas de huevo, ron y azúcar. El postre se espolvorea con cacao. El relleno dulce del tiramisú contrasta muy bien con el amargor del cacao y las galletas mojadas en café expreso. Sirve este postre frío pero no congelado. Deberías poder cortar porciones; la crema y las galletas son blandas.

Cannoli

Los cannoli son un manjar proveniente de Sicilia. Este postre italiano se caracteriza por una masa de base crujiente frita. Esta masa se rellena con una mezcla cremosa de ricotta y se espolvorea con azúcar. Además de los cannoli tradicionales, algunos reposteros italianos mezclan trozos de frutas confitadas con la crema, en tanto que otros bañan la masa en chocolate para hacer al postre más dulce.

Biscotti

Biscotti es la palabra italiana para panecillos. Los panecillos se hornean dos veces para obtener una textura crujiente. Aunque este postre puede comerse y disfrutarse solo, a menudo las personas mojan el biscotti en café, expreso, leche, té o vino. Hay diferentes variedades de biscotti; la masa puede incluir frutos secos, frutas o trozos de chocolate. El biscotti también puede ser mojados en chocolate blanco, negro o con leche.

Gelato

El gelato no es una versión italiana del helado; hay algunas diferencias claves. El gelato se mantiene a temperatura ligeramente templada y se bate más lentamente que el helado. También se hace con más leche entera y menos crema. El gelato es más denso, cremoso y tiene un sabor más perceptible. El gelato italiano viene en sabores tales como nocciola o avellana, stracciatella, que incluye el agregado de chocolate fundido mientras se está batiendo, y pistacchio, o pistacho. Si quieres algún sabor más común, el gelato también se encuentra en sabores a base de leche como café, fresa y chocolate, así como sabores de agua como naranja, limón, lima y frambuesa.

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