¿Te sientes estresado, disperso y no sabes como dejar de estarlo?

El estrés es una emoción muy común y es muy fácil dejar que se apodere de nuestro día.

Hay muchos factores que pueden provocarlo pero lo importante es saber cómo podemos contrarrestarlo o que hacer cuando creemos que puede salirse de control.

Te enseñamos 3 ejercicios de respiración que puedes hacer para ya no sentirlo: 

Respiración abdominal (Realizalo de 3 a 10 veces):

Siéntate o acuéstate en una posición cómoda.

Coloca una mano sobre el abdomen justo debajo de las costillas y la otra mano sobre el pecho.

Respira hondo por la nariz y deja que el abdomen le empuje la mano.

Exhala a través de los labios fruncidos como si estuvieras silbando. Siente cómo se hunde la mano sobre su abdomen y utilízala para expulsar todo el aire hacia afuera.

Respiración pasiva:

Esta respiración parte de una respiración natural o normal y consta de inhalar de manera profunda por la nariz y exhalar suavemente por la boca.
La respiración pasiva tiene la cualidad de atenuar ansiedad, angustia, palpitaciones o sofocos de manera rápida y relaja el sistema nervioso. Se realiza sin retención de aire tanto en la inhalación como en la exhalación.

Respiración matinal:

En posición de pie, inclínate hacia adelante desde la cintura con las rodillas levemente flexionadas y permita que los brazos cuelguen cerca del suelo.

Mientras inhalas lenta y profundamente, regresa a la posición de pie enderezando lentamente y levantando, por último, la cabeza.

Conten la respiración solo por unos pocos segundos en esta posición de pie.

Exhala lentamente a medida que regresa a la posición original, flexionando hacia adelante desde la cintura.

Al principio puede que te sientas mareado o raro porque tu cuerpo no está acostumbrado a asimilar el oxígeno tan lentamente, pero después podrás sentir los beneficios de estas técnicas para liberar estrés.